...Vive.

...Vive. Mientras seas joven, mientras quede tiempo... mientras sientas. Vive. De repente tengo un papel amarillo ante mis ojos, manchas rojas que han formado una lista. No quiero decir que son nombres, tampoco lo desmiento. Quizás son cosas por hacer o las que ya hice, ganas, deseos, recuerdos. He comenzado a leer un libro que promete cambiarme la mente, hace varias horas vi la película y ya algo se movió de lugar aquí dentro. Prefiero las letras, mi imaginación crea mejores escenas, me encanta ser el personaje principal. Continuo mi escritura, me fascina la energía que produce ese encuentro entre la punta del lápiz y el papel. Este es mi diario, para mi no necesita nombre, pero si necesitas ponerme un nombre a mi, para tratar de comprenderme "¡adelante! ¡No me importa! Pero sabed que lo que soy en realidad es una ninfa. Una nereida, una dríada. Una ninfa, sencillamente". Hoy...así todo comienza, así también puede terminar. Soy una piel, terminaciones, sensaciones, escalofríos. De repente tengo un deseo extremo por sentir, por descubrir. Me he perdido en una mirada, pase horas y no miento, buscando de donde salia tanta belleza, sensibilidad, sentimiento. Me dedique a tocar cada rincón de un cuerpo, tratando de aprenderme su fisionomía para cuando este ausente. Escuche la historia de sus cicatrices, roce sus labios, toque su pelo. Disfrute de las nubes que se pintaron en su espalda. Ni siquiera intento expresar lo que siento, porque aun no se lo que sea, simplemente me hace sentir llena, plena, satisfecha. Me dijeron vive cuando ya estaba muerta, pero me lo dijo el amor. Vive... Y estoy viviendo.