Cuando me levante, lo segundo que hice fue leer una revista. Llevo años comprando distintas revistas, solo porque me encantan las fotos de las modelos y los anuncios, quizás porque en mi interior quiero ser como ellas. Pero no tengo nada de parecido con ninguna, por mas que intente no lo tendré. Sin embargo, me siento cómoda conmigo misma. Cada vez que me pongo alguna crema en la piel, cuando me lavo la cara con mis exfoliantes, cuando me arreglo el cabello, mis perfumes, todos esos detalles me van dando un poquito mas de confianza. La belleza se pone, igual que la ropa. Es una actitud, una forma de ser. Y eso no quiere decir que ser arrogante y creerte la mas bella te hace serlo, al contrario, la humildad es una forma de ser bella. Lo que se dice, lo que se hace, como caminas, como miras, te van dando un poquito mas de seguridad en ti y es lo que reflejas lo que te hace hermosa. Estoy mirando un vaso y la verdad lo que me estoy tomando no me gusta mucho, pero el vaso es tan bello que me hace querer lo que tiene dentro. Creo que así funciona eso de la belleza, es un reflejo, todo se ve diferente depende de donde lo veas. Y hoy, cuando me mire en el espejo, con el pelo revuelto y sin forma, vi mi piel tan suave y radiante, que aunque en realidad muchos me vean horrible, yo me siento hermosa.
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