Tantas letras que pude haber dedicado a tus huesos, pero no perdí mi tiempo, porque había perdido las esperanzas. Así, que como eran suficientes perdidas, decidí perder también tu recuerdo, pero cada vez que quiere le da con pasear por mi mente, como si me interesara, como si fuera importante... y no se si se lleve alguna reacción de mi parte y la tire al lado de tu corazón, que quizás ya me ha olvidado. Posiblemente cause en ti las famosas mariposas estomacales, o quizá un leve sentimiento de tristeza al saber que hubieses podido ser feliz de haber escogido diferente. A su recuerdo le dedico mis memorias. Porque todos vivimos, todos recordamos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
girona.anays@gmail.com